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lunes, 8 de octubre de 2012

Primeras semanas en mi destino Erasmus

Bueno, lo primero siento haber tardado tanto en dar noticia sobre mis primeros días de Erasmus. Como pronto conoceréis si pensáis salir al extranjero a estudiar, estas semanas han sido un completo caos.

Me cancelaron la mitad de las asignaturas que estaban en mi Acuerdo de Estudios, por lo que tuve que buscar y realizar un Acuerdo completamente nuevo con el que poder convalidar las asignaturas de 2º en la Universidad de Granada. La primera semana de clase es un maremoto de estudiantes en las oficinas de la universidad, y tenía que echar una mañana entera para conseguir un solo sello o una firma en cualquier documento. Pero afortunadamente el papeleo ya se ha terminado, y puedo redactar un poco como ha sido mi comienzo en el Erasmus.

Manchester es una ciudad agradable. Es bastante "nueva", no esperéis murallas ni castillos pues aunque la fundaron los romanos no fue hasta la revolución industrial cuando la ciudad empezó a crecer de verdad. Aún así, es realmente agradable y bonita, con muchos parques y un centro comercial ENORME. Es la segunda ciudad más grande de Inglaterra (justo después de Londres), por lo que hay mucho ambiente nocturno y muchísimos conciertos de grupos muy famosos. Aun así, la ciudad no sobrepasa el medio millón de habitantes por lo que no es nada difícil escapar del ruido y las luces del centro de la ciudad.


Lo mejor de Manchester es que se encuentra en el centro de Inglaterra, a poco tiempo de bastantes ciudades conocidas como York, Sheffield, Liverpool y Birminghan (todas estas a una o dos horas en bus).


Manchester, al igual que Liverpool, es conocida por su escena musical (Oasis es uno de los grupos más famosos originados en Manchester). Hay muchos bares y pubs en los que hay música en directo dos o tres veces por semana. También hay discotecas de todos los estilos: las hay ambientadas en los 90, otras con música indie, rock, pop, house... da igual el tipo de música que escuches, en Manchester podrás salir de fiesta y escuchar a los mejores grupos.

El acento no es nada preocupante, aunque reconozco que cuesta un poco acostumbrarse las primeras semanas. Acostumbrada al sencillo acento americano y a los audios de los libros de texto en España, escuchar un acento británico del norte siempre supone un gran cambio. Aunque como os digo, en dos semanas ni os acordaréis de eso y podréis entender a  los mancunianos a la perfección. Además, son gente bastante simpática y que aprecia el esfuerzo de un extranjero por aprender inglés, así que no tienen problema en repetir algo si no lo has entendido a la primera, o harán lo posible por ayudarte si no sabes expresarte muy bien.

La universidad es completamente diferente a la universidad en España pero ya haré una entrada más adelante para contaros un poco con más detalle.

El tiempo me mata, no aguanto la lluvia y los días nublados. Pero por lo general me está encantando esta ciudad, su ambiente y su gente :) 

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